Es el tiempo en que los días son como más me gustan:
frescos, con neblina y lluvia fina (“El Chipichipi”).
En la “tierra” de donde soy cuando el clima está así dicen:
“Es un día típico Cordobés”
Y en la ciudad donde radico desde hace tres décadas dicen:
“Es una tarde Xalapeña”.
Aclarando que en ambos lugares la temperatura es muy parecida y más en esta época del año cuando se siente que la humedad “cala hasta los huesos”.
Esta atmósfera (como dije) me agrada mucho; me abrigo bien y la mayoría de esos días utilizo “ropa térmica” a la que llamo “bajo alfombra”.
“Ande yo caliente, ríase la gente”
No es que baje mucho el termómetro sino que es la “sensación térmica” provocada por la humedad, la que genera el frío.
Época en la que se canta:
“ya viene la noche Buena, ya viene la Navidad”…
”Temporada” (cada año escribo sobre ella) en la que se me acumulan los sentimientos, se agolpan las emociones, recurren los recuerdos de los seres queridos fallecidos, la nostalgia por aquella inocente niñez que aguardaba ilusionada los ansiados regalos; ésa que retornó con los hijos y reverdece con las nietas, reciclando aquella alegría…
Aparecen “el pascle” y el “musgo” en el “Nacimiento”, las figuras salen de sus cajas para decirnos que El Niño Jesús estará en el “Pesebre”.
El árbol toma su lugar en la sala con esferas y luces que brillan en estos días invernales, en algunas latitudes con frío y nieve o calor como en el ¡“Cono Sur”!.
Se escuchan “villancicos” y “melodías navideñas”, aparecen en la televisión las clásicas “películas de Navidad”. Surge “la Mercadotecnia” en las tiendas y autoservicios (cada año exageradamente anticipada).
Día a día el “Grinch” cobra mayor popularidad:
“…”El Grinch” (Un personaje que robaba los regalos y saboteaba los adornos navideños para enseñar a los “Quiénes” que la Navidad es mucho más que cosas materiales, es unión. Que el amor y la bondad son las sensaciones que más necesita el mundo)…”
Huele a ponche y buñuelos, a “pastel de frutas” en el horno, comida y más comida y los brindis proliferando.
Se hacen patentes las inspiradas felicitaciones anuales y muestras de cariño, así como los emotivos parabienes.
Lágrimas de alegría y de tristeza, pero al fin lágrimas.
Proyectos e ilusiones que colman nuestro corazón.
Ese corazón (relaté en otro escrito) recientemente intervenido y renovado a través de la colocación de tres “stents” con el propósito de que con su latido me recuerde que “tengo cuerda” para seguir gozando de “un montón” de “celebraciones decembrinas”.
Mientras, te invito a dar “…Gracias por todo lo que tenemos en esta vida, así no se nos olvida lo hermoso que es vivirla”.
“Intentar que las personas angustiadas, tristes, que no hallan sentido a su existencia, encuentren un lugar dentro de ellos mismos de paz interior y alegría”
Marian Rojas Estapé
“Es tiempo para disfrutar en familia la llegada de Jesús al mundo, les deseo unas Fiestas llenas de Paz y Armonía al lado de sus seres amados.”
”Esta noche es Noche Buena y mañana Navidad”
“¡FELIZ NAVIDAD!”
