Como comenté, se trataba de “gastar neumáticos” y nosotros lo veníamos haciendo por las costas del sur de Croacia cuando nos detuvimos en la frontera con Bosnia-Herzegovina. A diferencia de las fronteras de la U.E. donde algunas veces a penas nos percatábamos del cambio de País, esta vez entre Croacia y Bosnia si notamos evidentes variaciones sin llegar obviamente a los extremos de hace años; por citar los menores, la diferencia entre las carreteras y los servicios.
Íbamos con dirección a “Sarajevo” cuando vimos una desviación para “Medjugorje”, estando de acuerdo en tomarla para visitar (Dolores y yo por primera vez) “el Santuario” dedicado a “Nuestra Señora de Medjugorje”.
Mientras nos dirigíamos hacia allá notábamos la cantidad de vehículos y autobuses que se incorporaban…
“…Actualmente Medjugorje es uno de los lugares más visitados no solo de “Bosnia-Herzegovina”, si no de los Balcanes…”
“…Conocido mundialmente por ser un santuario donde se han dado “apariciones Marianas” en los primeros años de los 80tas. Desde el 2019 el Papa Francisco autorizó la organización de peregrinaciones oficiales de diócesis y parroquias de la Iglesia Católica. Hay una estatua de la «Reina de la Paz» marcando el sitio de la primera manifestación y otra en frente de la “Parroquia de Santiago”…”
…igualmente mucha movilidad en vendedores, peregrinos, sacerdotes así como comercios y lugares de hospedaje, pero todo en calma y tranquilidad como si ahí los “decibeles” casi desaparecieran…
Estacionamos el auto y “Gastando Zapatos” llegamos a la “Parroquia de Santiago” (arriba mencionada) pasando por un espacio muy grande con gradas para oficiar Misas masivas en eventos programado. Imágenes por doquier de la Virgen, pero dentro del templo hay una bastante grande con una cara y mirada muy dulce rodeada de una cantidad importante de flores. A mí en lo personal me trasmitió unas sensación de paz y serenidad, es decir una tranquilidad mental y espiritual.
…y dejamos Medjugorje para dirigirnos a Sarajevo.
