“Bar La Ópera …de grandes personalidades”

“Bar La Ópera …de grandes personalidades”

“…Hay sitios que se convierten en íconos en una ciudad no solo por su espectacularidad en arquitectura y diseño, sino también cuando tienen un significado cultural para la localidad y, por lo tanto, cuando se integran en su historia, creencias o actividades…”: ¡El “Bar La Ópera” es uno de ellos!.

Se han escuchado muchas anécdotas sobre este lugar…
¿Qué tanto es realidad y qué tanto es mito?
Veamos…

Nos dicen que:
“..Este tradicional “Bar” fue fundado como “Pastelería La Ópera” en 1876, por dos hermanas francesas con la idea de recrear las muy tradicionales cafeterías y confiterías parisinas. (Situado entonces en la esquina donde ahora está “La Torre Latinoamericana”).

Desde 1895 quedó ubicado en Avenida 5 de Mayo #10 a unas cuantas calles del Zócalo. (Llamado “La Ópera”, ya que muchos de sus clientes lo visitaban después de asistir a las funciones de “Ópera” que por las tardes se brindaban en el “Teatro Nacional”)…”. 

“…Se dice que se trataba de un lugar elegante y exclusivo en donde se hablaba de política, economía y literatura, con una clientela muy selecta. Entre ellos se encontraba Porfirio Díaz, su esposa Carmelita Romero Rubio, José Ivés Limantour, ministro de Hacienda y toda una sociedad de la clase más alta…”.

“…Entre los atractivos de esta cantina estilo “Art Nouveau” están sus techos barrocos con lunas biseladas, sus muebles de madera revestidos con terciopelo rojo y los oleos de importantes pintores plasmados en los gabinetes de madera de nogal.

Sin embargo el elemento que más destaca es su “contrabarra” traída de Nueva Orleans, Louisiana. “…Varios datos curiosos y anécdotas esconde este hipnótico lugar, como que tiene un “Salón más Pequeño” que se sabe era el destinado para “las mujeres”, pues hace más de un siglo no se les tenía permitido el acceso al “Salón Principal”. La división entre ambos espacios estaba determinado por un biombo que aún se conserva…”

Miles de personas han entrado a «La Ópera» antes cantina, ahora restaurante-bar, con el mismo objetivo: mirar un pequeño agujero en el techo de un centímetro de diámetro y fotografiarlo. “El huequito” podría pasar inadvertido en cualquier otro sitio, pero en este lugar se ha vuelto motivo de asombro y visita de mexicanos y extranjeros.
Aquel “pequeño punto” en el techo del local fue provocado por una bala que disparó Francisco Villa, según narran periódicos de la época:
“…cuando Villa entró al mencionado “Bar” y encontró a varias personas discutiendo, soltó un tiro al techo para llamar la atención de los presentes y obviamente, para “hacerse notar”…”

“Cada “Bar” cultiva sus fantasmas y hay presencias que persisten”

Importante puntualizar que “La Ópera” es mucho más que un “legendario balazo”. (lo mencioné en otro de mis “Gastando Zapatos”). 

“¡…Este lugar atesora más historias que botellas en su antiquísima barra …y eso es mucho decir!”

“Los “Bares” son puertas que nos conducen a otros tiempos y poseen las huellas de quienes las frecuentaban”

“…Hasta los armados Emiliano Zapata y Pancho Villa, cuando la llegada de “La Revolución” a la Capital Mexicana le dieron un inconfundible aire de “Cantina Botanera” al lugar…”

Una vez el “País” estuvo en calma, “La Ópera” volvió a tener clientela de políticos como: Emilio Portes Gil, Miguel Alemán, Adolfo López Mateos, Ernesto P. Uruchurtu (que era cliente asiduo) así como, a excepción de algunos, prácticamente todos los “exPresidentes Mexicanos”. 

Igualmente una lista inmensa de personajes de la cultura, la sociedad, el espectáculo y las artes de talla nacional e internacional; personalidades de “ayer”, de “hoy” y de “siempre”: Carlos Fuentes, Carlos Monsiváis, José Luis Cuevas, Gabriel García Marquez, Octavio Paz, Sofía Basi, el periodista Jacobo Zabludovsky entre otros, pasaron por ahí.

Es interesante comentar que cada vez que he “Gastado Zapatos” para visitar este “Bar” invariablemente escucho qué hay comensales o tertulianos extranjeros.

Desde hace 30 años los dueños decidieron catalogar a “La Ópera” como “restaurante-bar familiar”.

A mí me gusta visitarlo porque me remite al México de finales del siglo XIX con sus rincones, su minuciosa decoración, sus techos dorados con terminados europeos; contemplar y admirar la mítica “barra y contra barra de madera” traída (lo referí renglones arriba) desde Nueva Orleans en la época en que las hermanas Boulangeot fundaron el lugar. Colocada en la pared de lado izquierdo al ingresar al “Bar” y que dicen es única en el mundo…”

Otro detalle que a mí me ha tocado gozar es que un “Grupo de Salterio” interpretó “danzones”, “vals”, “polcas “y otros ritmos que transportan a los asistentes a épocas pasadas.

También he disfrutado la exquisita cocina con la que cuenta “La Ópera”, en esta ocasión saboreé un delicioso “pecho de ternera”…

En el “Bar-Restaurant La Ópera” los cinco sentidos explotan: vista, oído, gusto, tacto complementados con el aroma que se respira del México de antaño al del hogaño!!! 

¿Si es mito o realidad? 
No lo sé peroooo
Lo que sí sé es que continúen “Gastando Zapatos” por el “Centro Histórico de la CDMX”, en especial en “La Calle 5 de Mayo # 10”!!!!
¡Ahhh específicamente en: “El Bar La Ópera”!

«Hay cosas que sentimos en la piel, otras que vemos con los ojos, otras que nomás nos laten en el corazón»
Carlos Fuentes

Otros escritos que te pueden interesar...

A través de una vida ligada al Turismo, a la Comunicación, a la Promoción y la Mercadotecnia hoy la tecnología me permite transmitirte, en diversos canales, los diferentes ámbitos de algunas de mis experiencias, ocurrencia, anécdotas, etc. por el mundo, tanto como turista como por estudioso del Turismo.

Es por ello que, con gran emoción, te presento a: «Gastando Zapatos», deseo disfrutes de mis escritos y me encantaria escuchar tus comentarios, ya sea a traves de este sitio web o alguna de mi redes sociales.

Turismo son experiencias !
“Viajar es conocer y conocer es vivir “
Tu amigo e incansable viajero…
Luis Eduardo Ros

Deja un comentario